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reflexiones sobre administración pública inteligente

miércoles, 15 de julio de 2009

La tocada de narices de los empleados públicos.. y de Granados


Ayer me quedé un poco estupefacto al comprobar cómo a algunos responsables políticos de primer nivel, con responsabilidades de gobierno, se les puede llegar a calentar tanto la boca en actos públicos hasta llegar a decir cosas del tipo como no podemos contratar a nadie a tiempo parcial, contratamos a una persona para que esté ocho horas sabiendo que va a estar cuatro horas tocándose las narices.


Mi sorpresa no es por la frase en sí, ni por el fondo de la misma. Al final el mensaje de fondo es que en el sector público hay importantes bolsas de ineficiencia (capacidades instaladas superiores a las cargas de trabajo generadas) y que dicho sector no se dota de las herramientas necesarias para poder ajustar esos desequilibrios. Estoy de acuerdo, aunque con matices: las bolsas de ineficiencia no afectan a todas las áreas ni a todos los niveles administrativos por igual; además hay segmentos en los que lo deseable es que se "toquen las narices": ¿queremos a bomberos todos los días apagando incendios? ¿nos apetece que las fuerzas armadas estén ocupadas al 100% utilizando su armamento?


Lo que me preocupa es quién la dice, cómo se dice y dónde: que lo haga uno de los miles jefes que hay en este país, harto de luchar por sacar adelante un servicio sufriendo las incoherencias de un sistema de gestión de recursos humanos anticuado y teniendo delante de sus narices todos los días las ineficiencias del mismo; o un ciudadano de a pie que va a una oficina pública y ve a ese funcionario que sale a tomar café... es comprensible. Pero no olvidemos que Octavio Granados es miembro de un Gobierno y se sienta todas las semanas en la Comisión General de Secretarios de Estado y Subsecretarios, presidida por la Vicepresidenta de ese Gobierno (para más inri responsable directa de las políticas de función pública). Por ello, tiene una responsabilidad (yo diría cómplice) en esta situación. ¿Por qué no lo plantea en dicha Comisión?


Además, el sr. Granados es también secretario de Política Económica y Empleo en la Ejecutiva del mismo partido que en su programa electoral llevaba como propuesta la Reforma de los servicios centrales de la AGE mediante un plan de reestructuración que permita tener una Administración con una dimensión ajustada a sus funciones y a las necesidades de la ciudadanía.


En ese sentido, sugeriría al sr. Granados y al gobierno al que pertence que desarrollaran su programa electoral. Para hacerlo le propondría algunas cosas. Por ejemplo, si "no queda más remedio que cuando contratamos a una persona lo sea por ocho horas" le diría que: saquen menos plazas a empleo público, amorticen más efectivos, y reduzcan el número de puestos de la anchísima base de la pirámide que es la estructura de la Administración del Estado, especialmente en los subgrupos C1 y C2. También le animaría a estudiar la organización del trabajo, a ver si los que se "tocan las narices" lo hacen porque son así de vagos o porque la rutina y el hacer las cosas siempre de la misma manera hacen que no les den trabajo suficiente para completar la jornada.


Si "lamenta que no puedan contratar a tiempo parcial" le diría que se plantee primero si los puestos de trabajo de subgrupos C1 y C2 deben ser puestos de funcionarios de carrera, que pare los procesos de funcionarización en estos ámbitos y que para el personal laboral negociara en la mesa de función pública la implantación (donde fuera necesario) de los contratos a tiempo parcial. Si finalmente (por los motivos que fueren) no optara por esta vía que estudiara las fórmulas jurídicas para plantear una reforma del EBEP o un desarrollo del mismo que incluyera jornadas reducidas en el personal estatutario (cosa que dudo que pudiera). O, por último, que sacara del cajón el plan de teletrabajo que el ministro J. Sevilla quiso impulsar en la AGE.


Y por último le diría que suerte con el proyecto de creación de la nueva Agencia estatal de la Seguridad Social. Que se animara a aprovechar las potencialidades del modelo de agencias en cuanto a flexibilidad organizativa y que fuera valiente para aplicar, en el ámbito de sus competencias, todas estas ideas. A ver si es verdad....


El problema de decir este tipo de cosas es que echan más leña a esa idea del ciudadano de a pie de que el sector público está lleno de vagos e incompetentes. Cosa que no es verdad. Yo le animaría a hablar menos y hacer más. Que todos lo necesitamos.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Un bombero mientras no apaga fuegos se está tocando las narices? ¿Un militar mientras no guerrea esta tocándose las narices? Bonita forma de conocer y valorar el trabajo de los funcionarios públicos. A lo mejor pretendes que se contrate a los bomberos a tiempo parcial y siempre que haya fuego...

ocortes dijo...

@anónimo: o no me he explicado bien o no me has comprendido. Me refiero que hay profesiones públicas que no por no estar actuando directamente se están tocando las narices.... y que eso no implicaría que se les hiciera un contrato a tiempo parcial

Anónimo dijo...

Lo siento, te leo de vez en cuando y, yo tampoco te entiendo cuando sacas este tema (todo lo referente a los grupos C1 y C2). Desde mi óptica no son más productivos y eficientes muchas de las personas que ocupan puestos en el A1 y A2 y, además, son responsables de no "liderar" a los C para que el trabajo de la función pública cotice al alza.
Seguiré leyendote de vez en cuando a ver si alguna vez entiendo tu discurso, de momento me parece "elitista".
Aclaración: Si, pertenezco al C2, y, te aseguro, me importa mucho la calidad (productividad, eficacia, eficiencia...) de los servicios públicos.
Un saludo.

ocortes dijo...

@anonimo, creo que mis comentarios pueden estar más o menos acertados pero no son elitistas. La estructura actual de la AGE no ha evolucionado mucho en las últimas décadas: es una pirámide de una amplísima base en la que hay muchos puestos que en el contexto de una nueva Administración del s. XXI , con un uso intensivo de la tecnología no tendrían sentido. Pero eso no tiene nada que ver con "elitismo", ya que para nada es desmerecer a este tipo de empleados públicos sino que es una cuestión de opinión organizativa en relación a un modelo diferente de Administración. Además también considero que los puestos de este tipo que tuvieran sentido mantener no deberían ser en clave funcionarial, sino laboral.Y desde luego para nada cuestiono el interés de estos colectivos por el buen hacer en el servicioi público. ¡Dios me libre! Si lo he dado a entender en este post, discúlpame.